De Narváez admitió llamadas

El candidato a diputado por el peronismo disidente Francisco de Narváez reconoció anoche que desde un teléfono celular perteneciente a una flota de aparatos de una empresa de su propiedad se realizaron tres llamadas telefónicas a un traficante de efedrina preso, tal como denunció la Aduana.
Pero dijo que se trataba de "maniobras de desprestigio de la Aduana nacional". El traficante que mencionó la Aduana es Mario Segovia, que usó el alias de "Héctor Benítez". "No conozco al señor Segovia ni a «Benítez». El teléfono móvil pertenece a una flota de equipos celulares a cargo de personas que trabajan en un establecimiento rural de mi propiedad", dijo De Narváez en una declaración, y reclamó que "la campaña electoral se mantenga en el terreno de las ideas y las propuestas."
De Narváez se presentó ante la Justicia diez días atrás, tras las versiones que señalaban que la Aduana lo iba a denunciar por supuestas vinculaciones con el tráfico de efedrina. La causa recayó en el juzgado de Octavio Aráoz de Lamadrid, que le preguntó a la Aduana si investigaba al candidato a diputado nacional.
El viernes último, la Aduana le informó al juez que en una vieja causa de 2006, en la cual el fisco era querellante, aparecían tres llamadas telefónicas de De Narváez a Segovia, en ese entonces investigado por contrabando de CD y DVD, y ahora preso por ser considerado el "Rey de la Efedrina". Controversia
La denuncia provocó una controversia entre la candidata a diputada nacional bonaerense por la Coalición Cívica-UCR Margarita Stolbizer y la candidata a diputada del peronismo disidente Claudia Rucci, que apoya al empresario.
Stolbizer pidió que De Narváez renunciara a presentarse a las elecciones, aunque la acusación fuera una "operación del kirchnerismo desesperado".
La opinión de la dirigente de la CC fue respondida por la candidata de Unión-Pro Claudia Rucci, quien replicó que Stolbizer debería renunciar a sumarse a la campaña sucia iniciada por el Gobierno y entender que "la vida por un voto más no debería ser la guía de su conducta ante situaciones como la presente".

Fuente:La Nación