Allí es donde surge el temor de los padres de los adolescentes por la propagación de enfermedades frente a la utilización de este tipo de sanitarios.“Tenemos miedo a los contagios de meningitis” alertó Mirta Guzanán, mamá de una alumna del colegio, quien además aseguró que “los días de lluvia se suspenden las clases porque se electrifican las paredes”.
La situación de crisis se presentó a principios del año pasado cuando las instalaciones de la escuela se subdividieron para albergar a dos instituciones educativas en un mismo espacio, la antigua EGB Nº 137 se fraccionó en dos: la Secundaria (ESB) Nº 55 y la Primaria (EPB) Nº 137.
Frente a estos cambios, el edificio comenzó a recibir modificaciones estructurales y se construyeron nuevos baños, pero el nivel Secundario jamás recibió los tanques de agua para poder utilizarlos.La solución provisoria fue la instalación de inodoros químicos en el patio de la escuela que hasta el día de hoy siguen funcionando.Los padres de los alumnos formularon denuncias ante la Directora del Consejo Escolar de La Matanza, Hydeé Villagrán, y todavía esperan respuesta al reclamo presentado hace veinte días.
Por su parte, los directivos del colegio también han elevado las demandas a los responsables competentes pero aún no han recibido respuesta a los reclamos. En el Consejo Escolar del Partido de La Matanza, la ESB Nº 55 figura en “estado de obra”.
Esta lamentable situación, pero de la EPB 137 ya fue denunciada, a través de ste medio por la Compañera Lucía Laura Seghezzo, delegada de base del establecimiento.
Fuentes: propia y periodicouno
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