Ochenta millones de pesos, miles de toneladas de asfalto y muchas luces de neón. Con esta combinación de recursos y materiales el Gobierno bonaerense intentará transformar el oscuro y deteriorado Camino de Cintura en una alternativa vial para cuatro millones de personas que viven cerca de esa carretera en el corazón del conurbano provincial.El proyecto de repavimentación, bacheo y señalización de la ruta nacional Nº 4 buscará hacer transitables los 70 kilómetros que cruzan 11 distritos del sur, oeste y norte del Gran Buenos Aires.Hoy, el Camino de Cintura es una cadena interminable de pozos, banquinas destrozadas y puentes arrumbados. Aún así, más de 55 mil coches, camiones y colectivos pasan todos los días por esa vía.
Fuente:Clarín
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