La Comisión de Enlace espera sin mucho entusiasmo que se concrete la invitación al diálogo anunciada el jueves pasado por la presidenta Cristina Kirchner. La agenda ruralista no es muy novedosa: el sector reclama la apertura de las exportaciones de carne y granos -cuotificadas desde hace años-, y una baja sustancial en las retenciones a los embarques de soja.
"Una rebaja en trigo y maíz no sirve para nada porque ya se vendió todo.
"Una rebaja en trigo y maíz no sirve para nada porque ya se vendió todo.
Esas alícuotas ya deberían haberse eliminado drásticamente y las retenciones a la soja deben ser disminuidas progresivamente", pidió el presidente de la Sociedad Rural, Hugo Luis Biolcati. Respecto de la carne, su par de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, tampoco anduvo con vueltas: "Hay que suspender por 180 días los pedidos de ROE [permisos de exportación] y hacer una intensa campaña de promoción de las carnes sustitutas", dijo, en alusión al faltante de cortes vacunos que podría provocar en el mercado interno una liberalización abrupta del comercio exterior.
Pero mientras esperan la convocatoria oficial, en el campo también tratan de limar viejas y nuevas asperezas. Las antiguas tienen que ver con las diferencias históricas entre las entidades. "Esta comisión enlaza realidades distintas, entidades que no tienen un mismo criterio. Es un ámbito de enlace que vincula a quienes por naturaleza son distintos y seguirán siéndolo", afirmó Buzzi. En cambio, para Biolcati, la Comisión de Enlace "goza de muy buena salud". Lo mismo sostuvo su par de Coninagro, Carlos Garetto: "Está más firme que nunca. Los productores de la Rural o de la Federación Agraria tienen los mismos problemas y necesitan las mismas soluciones".
Las nuevas asperezas están relacionadas con el nuevo escenario planteado para el campo, que puede jactarse de su impronta política propia y sus diez agrodiputados. De hecho, en la primera reunión del ruralismo después de las elecciones, ya se registró el primer roce. El vicepresidente de la Federación Agraria y diputado electo Ulises Forte avisó que su alineamiento con la Unión Cívica Radical (UCR), partido del que es afiliado, es incondicional. Es más: a los asistentes al encuentro les "chocó" -según la expresión usada por uno de los presentes- que Forte hablara de "ustedes", en referencia a los ruralistas.
(...) Ya le pasó a Silvio Corti, una joven promesa de la FAA que pasó al ostracismo por negociar unilateralmente una frustrada candidatura por el partido de Martín Sabbatella.
Además, en el seno de la Comisión de Enlace empiezan a jugarse nuevas cartas: las relacionadas con la incipiente carrera hacia 2011. Varios ruralistas -incluso algunos de los diputados electos- ya trabajan para competir por cargos ejecutivos en sus respectivas provincias. Unos, como Forte, cierran filas detrás del vicepresidente Julio Cobos; otros, como Buzzi, se anotaron con Carlos Reutemann, y están quienes -como el ex presidente de la Rural, Luciano Miguens- ya definieron su preferencia por Mauricio Macri. Y hay una legión de dirigentes dispuestos a pagar con su lealtad la decisión de Elisa Carrió de abrir las listas del Acuerdo Cívico y Social a los candidatos del campo.
Pero mientras esperan la convocatoria oficial, en el campo también tratan de limar viejas y nuevas asperezas. Las antiguas tienen que ver con las diferencias históricas entre las entidades. "Esta comisión enlaza realidades distintas, entidades que no tienen un mismo criterio. Es un ámbito de enlace que vincula a quienes por naturaleza son distintos y seguirán siéndolo", afirmó Buzzi. En cambio, para Biolcati, la Comisión de Enlace "goza de muy buena salud". Lo mismo sostuvo su par de Coninagro, Carlos Garetto: "Está más firme que nunca. Los productores de la Rural o de la Federación Agraria tienen los mismos problemas y necesitan las mismas soluciones".
Las nuevas asperezas están relacionadas con el nuevo escenario planteado para el campo, que puede jactarse de su impronta política propia y sus diez agrodiputados. De hecho, en la primera reunión del ruralismo después de las elecciones, ya se registró el primer roce. El vicepresidente de la Federación Agraria y diputado electo Ulises Forte avisó que su alineamiento con la Unión Cívica Radical (UCR), partido del que es afiliado, es incondicional. Es más: a los asistentes al encuentro les "chocó" -según la expresión usada por uno de los presentes- que Forte hablara de "ustedes", en referencia a los ruralistas.
(...) Ya le pasó a Silvio Corti, una joven promesa de la FAA que pasó al ostracismo por negociar unilateralmente una frustrada candidatura por el partido de Martín Sabbatella.
Además, en el seno de la Comisión de Enlace empiezan a jugarse nuevas cartas: las relacionadas con la incipiente carrera hacia 2011. Varios ruralistas -incluso algunos de los diputados electos- ya trabajan para competir por cargos ejecutivos en sus respectivas provincias. Unos, como Forte, cierran filas detrás del vicepresidente Julio Cobos; otros, como Buzzi, se anotaron con Carlos Reutemann, y están quienes -como el ex presidente de la Rural, Luciano Miguens- ya definieron su preferencia por Mauricio Macri. Y hay una legión de dirigentes dispuestos a pagar con su lealtad la decisión de Elisa Carrió de abrir las listas del Acuerdo Cívico y Social a los candidatos del campo.
Fuente:La Nación
No hay comentarios.:
Publicar un comentario